5 puntos clave para ayudarnos a escuchar nuestro cuerpo

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Por Dr. David Serio.

Todos vivimos en nuestros propios cuerpos, y nadie podrá entender cómo nos sentimos o qué significan las diferentes señales, signos o síntomas para nuestras vidas. Nuestros cuerpos están diseñados con una inteligencia interna que tiene la misión de mantenernos vivos, adaptándonos y en armonía. Una vez que aprendemos a comprender mejor lo que nuestra inteligencia innata intenta comunicar a nuestra mente educada, podemos utilizar estas señales, signos y síntomas para aprender, crecer y evolucionar; en lugar de pensar típicamente que estamos enfermos.

  • Paso 1/ Confianza

“Confía en la naturaleza, ella sabe mejor.” (Irina Ratushinskaya)

Si reconocemos que la naturaleza tiene un diseño inteligente, entonces debemos reconocer que nuestros cuerpos tienen un diseño inteligente porque somos parte de la naturaleza. ¿Cuántos de nosotros confiamos en que el sol saldrá y se pondrá cada día? La misma inteligencia que organiza este proceso, así como miles de millones de otros procesos en la naturaleza, coordina los 8 mil millones de reacciones en nuestro cuerpo, por segundo cada día de nuestras vidas.

Si entendemos este hecho científico, entonces tenemos la sabiduría para comprender que cualquier signo, síntoma o señal que produce nuestro cuerpo es el resultado de esta sabiduría interna en acción. La sabiduría del cuerpo se está adaptando, haciendo todo lo posible para crear armonía, tratando de enseñarnos algo o dándonos una señal de advertencia de que algo esta pasando.

La clave es conocer nuestros cuerpos tan bien, que tengamos total confianza para entender el proceso y tomar las medidas adecuadas.

  • Paso 2  / No juzgues

“El juicio nos impide ver el bien que está más allá de las apariencias”. (Dr. Wayne Dyer)

Somos muy rápidos para poner un nombre a cada síntoma, como tengo gripe, dolor de cabeza o indigestión, por ejemplo. El segundo que ponemos un nombre a nuestro síntoma lo ponemos en un lugar de juicio que pone una cierta energía y acción en el síntoma.

Lo más poderoso que se puede hacer es experimentar y sentir el síntoma sin ponerle un nombre., observar sin ponerle una carga energética. Entonces pregúntate ¿por qué tengo este síntoma? ¿Qué está tratando de decirme mi cuerpo? ¿Qué interferencia tengo en mi vida que posiblemente esté contribuyendo a esta experiencia? ¿Qué puedo hacer proactivamente para superar esta situación? ¿Veo un patrón en mi vida de cuándo aparece esta señal o síntoma? ¿Se está adaptando mi cuerpo? ¿Armonizando? ¿Mi cuerpo está tratando de enseñarme algo? ¿Es esto una señal de algo más serio que debo revisar?

  • Paso 3/ Aprender

“Si aprendes a escuchar a tu cuerpo cuando susurra, entonces no tendrás que escucharlo gritar”.

Cuando te vuelvas tan bueno conectando con tu cuerpo y aprendiendo a escuchar cada señal, síntoma y mensaje de tu cuerpo, estarás en el camino de la sabiduría. Cada día será una oportunidad para aprender, crecer y evolucionar con tu cuerpo como tu gran maestro.

El mayor bloqueo de este camino es cuando tenemos miedo de una señal o síntoma, lo juzgamos y luego tomamos algo del exterior para cubrirlo (generalmente pastilla). Este proceso tiene el efecto contrario de permitirnos conectarnos con el cuerpo, aprender, crecer y evolucionar.

  • Paso 4/ Tiempo

“No apresures el proceso, las cosas buenas toman tiempo”.

El principio número 6 de la quiropráctica establece que no hay proceso que no requiera tiempo. Aprender a escuchar nuestros cuerpos, confiar en la sabiduría de nuestros cuerpos, no encubrir sus señales y evolucionar es un proceso. Nuestras sociedades nos entrenan de afuera hacia adentro y para hacer lo contrario, ser amable contigo mismo, ser consciente y comprender que escuchar nuestro cuerpo; es un viaje de toda la vida. En el momento en que comience este camino, experimentará una mayor libertad en la vida, más paz, sabiduría y conocimiento de la vida, sin mencionar que será más saludable y minimizará los problemas.

  • Paso 5/ Atención quiropráctica

“La quiropráctica es una de las ciencias más grandes de la historia humana en lo que respecta al potencial humano, la salud y la vida”. (Dr. David Serio)

Nuestro sistema de comunicación interna es el sistema nervioso central, el cerebro y la médula espinal. Este sistema coordina 8 mil millones de reacciones por segundo. Cada célula, tejido y órgano se comunica con su cerebro a través del sistema nervioso central. La columna protege este delicado sistema. Si hay una subluxación vertebral (vértebras desalineadas) que interfieren con el flujo de energía e información, se produce una desarmonía y hay una ruptura de la comunicación interna.

Por eso es esencial recibir atención quiropráctica regularmente. Todos, los 4 puntos anteriores se anulan si el sistema de comunicación interna de nuestro cuerpo no puede hacer su trabajo sin interferencias. Si recibimos atención quiropráctica con regularidad, podemos estar seguros de que los mensajes, señales, signos y síntomas son una expresión perfecta de un cuerpo que funciona sin interferencias en su sistema de comunicación.

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